jueves, 14 de noviembre de 2013

ESTÁ CLARO: LES GUSTA LEER

Siendo de diferentes centros del municipio, con gustos diversos y sobre todo siendo niños, es asombroso como escuchan las explicaciones de los demás en nuestra ronda positiva.

En este grupo con solo estar unos minutos con ellos, te das cuenta que les gusta leer, que han venido a la actividad porque son curiosos; poco a poco están aprendiendo a ser críticos con sus lecturas y a tener diferentes puntos de vista sobre un mismo libro. Bastante enriquecedor, diría yo.

Durante la sesión de hoy, hemos utilizado objetos característicos de cuentos populares: flautas, capas rojas, monedas, chocolatinas, varitas mágicas, manzanas,cerditos, pelucas... pero es curioso,  cuando les he enseñado la calabaza ¿qué les ha sugerido? : Halloween, curiosamente esta sesión es la noche del 31 de octubre y están tan influidos por esta fiesta, que no han pensado en Blancanieves.

Después han imaginado un cuento cada uno con el objeto seleccionado enlazando el final de la historia de uno con el principio de otro  y finalmente hemos tenido oportunidad de ver que valores y sentimientos hay en los cuentos:

Cenicienta: orgullo y envidia
El patito feo: superación y tolerancia
El soldadito de plomo: amor, fortaleza,tesón
El gato con botas, confianza y humildad
Caperucita Roja, discreción, humildad

De todos ellos, "mis chicos" piensan que la tolerancia es uno de los valores más importantes en la sociedad y que no hay que juzgar a las personas por su apariencia. ¿no es para sentirse orgullosos de esta generación?

SE SIENTE LA EMOCIÓN.

Cuando un lector, siente lo que lee se palpa la emoción en su mirada, en su forma de expresarse en el brillo de su voz. 
Así es como he visto hoy a mis pequeños lectores, poniendo la ilusión en cada momento de la hora que hemos pasado juntos visitando el museo etnográfico de nuestro centro cultural, y descubriendo palabras nuevas tales como, orinal, alforja, podadera, cantina.... entre otras. Ha sido un traslado en el tiempo 80 años atrás, en los que en una era tecnológica como la que vivimos les parece impensable la posibilidad de calentar una plancha en el calor del fuego o el que el agua no llegue a casa.

Cada día, disfruto aprendiendo de su honradez y sinceridad, de la facilidad que tienen para reírse de si mismos y como mastican y digieren datos para que su aprendizaje sea mejor.